MI ALMA ESTÁ TRISTE

MI ALMA ESTÁ TRISTE

Hola SER UNO... Les escribo esta carta porque se me hace totalmente irreal lo que está pasando en mi ciudad. Hace unos meses se hizo un estudio y se tomaron tres ciudades del mundo, en donde viven las personas más felices y entre ellas escogieron mi ciudad. Y en verdad lo era, gente trabajadora, vida familiar, etc. Pero desde hace unos años la violencia se ha ido incrementando de manera exagerada, hechos realmente sanguinarios nunca vistos en el país, con tintes de guerra, como coches bomba, armas de alto calibre (hasta más potentes que las del ejército). Me niego a creer en un cambio antinatural de la noche a la mañana, y por esto no creo que puedan ser los mismos ciudadanos. Existen intereses ocultos y manipulación de algún tipo, pero desconozco el fin a lo que se quiera llegar. ¿Estamos siendo manipulados para llegar a un fin? ¿Es para un bien común? ¿Nos ayuda o nos perjudica todo esto que está pasando? Ojala me puedan ayudar a clarificar mis dudas. Saludos… María.

Respuesta: Estimada María... Gracias por escribirnos y transmitirnos tus inquietudes. Estas preguntas que te haces, nos las hacemos todos los seres de “Bien” de este planeta. Mientras que muchos de nosotros estamos haciendo un esfuerzo sobre-humano, para salir de la ignorancia, violencia, injusticia, control, manipulación, agresividad e intolerancia que la vida nos impone y luchamos día a día de mil formas y mil maneras para mejorar este mundo, colocando nuestro granito de arena, reeducándonos a nosotros mismos y a nuestros hijos, para encaminarnos por el sendero de la rectitud y de la espiritualidad… Otros, los seres del “Mal”, causan desastres, control, vicios, drogadicción, guerras, aniquilamiento, contaminación física y psíquica, lo hacen sin una gota de compasión, con un total desamor, ya que dentro de sí no poseen ningún respeto a la vida, a la humanidad y menos podemos decir, que tengan Consciencia de la existencia y de la espiritualidad.

El “Mal” avanza, cuando el “Bien” se lo permite, por miedo, intereses, corrupción, ganancia, ambición, comodidad, indiferencia, inercia etc. Las almas negativas-enfermas, se encuentran arraigadas como los parásitos, en todos los estratos sociales y lo que impulsa al mal, es la codicia y ambición, creada en base a los intereses controlados y manipulados, de organismos que se han desarrollado como un pulpo, e infiltrado sus tentáculos en todos los ámbitos de nuestro planeta. Esta corrupción rige gobiernos, religiones, seres y países enteros, los cuales están enfermos, distorsionados y totalmente inmersos en la materialidad de sus deseos mezquinos, egoístas y deshumanos. Debemos tener nuestra alma abierta, confiar y creer en la providencia divina. Existe dos tipos de justicia: La Justicia de los Hombres y la Justicia Divina. De la primera muchos podrán escapar usando artimañas, trampas y habilidades fraudulentas por la falta de consciencia, pero de la segunda jamás podremos escapar, esta es implacable, justa y totalmente clara… De esta justicia, nada ni nadie escapará.

Estamos entrando en la época de la cosecha de almas, significa: Que todo lo que fue sembrado en el alma del hombre, por los Maestros Ascendidos, por nuestros Hermanos Mayores y por los grandes seres de nuestra historia, que vinieron a enseñarnos las verdades universales, comenzarán a dar sus frutos y la mala hierba será erradicada por siempre jamás. Muchos de los que están leyendo estas líneas pensarán, que es ilusorio pensar así y que la Tierra se dirige a su propia auto-destrucción. No debemos pensar así, el universo es muy ordenado y equilibrado. Cuando la balanza comienza a inclinarse hacia un lado, inmediatamente pone orden y nunca va a permitir que el mal avance o se arraigue, porque eso significaría su propio aniquilamiento. La naturaleza es sabia y debemos confiar en las fuerzas universales, ellas ya están tomando las medidas ciertas y necesarias, para que esta célula llamada Tierra y los seres positivos-sanos que la habitan, den un vuelco positivo y elevado en sus existencias.

Tenemos que tener muy presente en nuestra vida, a dos grandes e importantes maestros: El Maestro Tiempo y la Maestra Vida. Ellos dos nos ayudarán a colocar orden y justicia, pero debemos entender que toda lucha, todo cambio, siempre viene acompañado de dolor, sufrimiento, amargura, tristeza, malestar, padecimiento y sobre todo de muchas lágrimas, las cuales serán necesarias para ayudarnos a entender, luchar, lidiar, combatir, transformar y limpiar el Camino de Regreso... Camino del Ser.

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