GEOMETRÍA SAGRADA
Todos
sabemos algo de geometría, pero quizás nos parece difícil entender como la
geometría puede ser algo sagrado. A través de la geometría sagrada entendemos
de una manera sencilla para nuestro cerebro izquierdo, cómo existe una conexión
profunda en toda la creación. La geometría sagrada es el lenguaje simbólico de
las fuerzas de la creación del universo y nos ayuda a entender mentalmente lo
que ya intuitivamente conocemos.
Todo
en el universo proviene de una misma fuente o Inteligencia Universal, que algunos
llamamos Dios, o Madre Naturaleza, o Gran Espíritu y la Geometría Sagrada nos
demuestra, con conceptos que puede captar nuestra mente racional, como todo lo
que existe fue creado por medio de los mismos principios básicos, como desde un
simple átomo hasta una inmensa galaxia siguen un mismo patrón geométrico
idéntico. En los tiempos mas remotos, el hombre hubo de considerar multitud de
formas que se corresponden, muy aproximadamente con las figuras objetos de la
Geometría.
En
muchos minerales, vegetales y animales aparecen triángulos, círculos, hexágonos,
elipses y espirales. Pero desde el conocimiento de estas formas seudo-geométricas
concretas hasta la creación de las nociones abstractas, fundamentalmente de la Geometría,
transcurrieron acaso centenares de miles de años: el tiempo necesario para que
la mente reconociese las semejanzas entre las figuras naturales concretas y
supiese agruparlas en unos cuantos tipos fundamentales. En la Geometría
concurren circunstancias especiales, ante todo, de constituir el molde
primigenio de todas las ciencias del espíritu. Con razón comenta D. Papp que la
Geometría es tal vez el mayor descubrimiento del hombre. Y no porque la
Geometría haya creado el concepto de espacio, concepto que según Bergson es la
materia con que construye el espíritu.
En
consecuencia, la geometría sagrada de la red contiene los patrones de energía
de la flor de la vida, la matriz cristalina de la creación. La flor de la vida
es el código o matriz holográfica que el espíritu universal diseñó para poder
crear y manifestar todo lo que existe en el universo. Este código es el patrón
original a través del cual la vertiente divina crea, expande y desarrolla
absolutamente toda manifestación de vida. Todo lo que existe, todo lo que es,
nació y nacerá a partir de esta matriz divina. Este holograma representa una
secuencia geométrica esférica (unidad), conformada por infinitas esferas que se
contienen y se entrelazan unas con otras dando forma a la “flor de la vida”.
A
su vez la flor de la vida está constituida por infinitos códigos de color,
sonido y formas geométricas con los cuales se diseña y expresa cada átomo de
vida. Cada célula de nuestro ser contiene total información de la perfecta
salud, por lo tanto en cada ser habita la memoria universal de la armonía y
plenitud capaz de revertir y transmutar todo proceso de enfermedad
envejecimiento y desbalance vibracional con la simple intención amorosa y de
conexión al patrón original. A pesar de que esta información parezca nueva y sorprendente
es muy antigua.
Los
egipcios, Atlantes, esenios, Mayas, conocían perfectamente este holograma y lo
utilizaban para sanar y restaurar cualquier parte desarmonizada, empleando la
intención, pensamiento, adecuada, restableciendo el orden, el rejuvenecimiento
y la perfecta saluden sus cuerpos físicos y etérico. Actualmente la aplicación
de técnicas de sanación holográfica se ha desarrollado en todo el planeta de
una forma conmovedora y continua en expansión. No es coincidencia que la
memoria del poder de este símbolo sea devuelta al planeta en estos momentos.
Ustedes son la flor de la vida. Viajando por estas matrices, contemplando desde
el microcosmos al macrocosmos, hologramas, fractales, espirales. Nos recuerda
la frase de Hermes: así como es arriba, es abajo, para hacer el milagro de una
sola cosa.
Las
matrices utilizadas en Tibet y en otros lugares denominadas Mandalas, son
denominados psicodramas, sus representaciones figurativas constituyen
proyecciones de contenidos espirituales, cuya clave hay que conocer. Mediante
elementos iconográficos empleando la imagen o instrumento se invita al
pensamiento del que medita a encontrar el camino de su yo interior para
realizarse en él. El mandala representa las fuerzas cósmicas actuando dentro un
ámbito arquetípico, es una suerte de lenguaje celestial. Por este motivo es
utilizado para fijar la observación y elevación del estado de conciencia,
mediante representaciones visuales ligadas a experiencias interiores. Son un
sistema de estructuras geométricas ensambladas que crean un conjunto de
estímulos y representaciones de colores y formas que actúan en el observador
como concentrador y generador de energía brindando inspiración.
Los
mandalas son un despertador hacia niveles de conciencia superior, puertas de
conexión con el mas allá. Descubrir sus códigos es encontrar las llaves que nos
reconectan con la luz superior que habita dentro, para comprender y
experimentar que formamos parte de una conciencia superior. El mandala trabaja
enviando estímulos sensoriales a la mente interna en forma similar a lo que hoy
se conoce como subliminal. El mensaje pasa a través de la visión hacia los
receptores del cerebro en donde se procesa y se obtiene una reacción, como
cambios de actitud positiva, recuperación de autoestima, liberación de miedos,
angustias, desbloquea emocionalmente y genera una gran cantidad de cambios
internos. Esta posibilidad que da el mandala, parte de que su estructura de
forma es correspondiente a la estructura de formas arquetípicas posibles que
adquiere el universo en constante cambio y evolución. Son las infinitas
posibilidades que tiene el caleidoscopio del universo.
Los
mandalas dan una sensación de traslado o viaje multidimensional, preparan a la
mente para centrarla, expandirla, a nuevos conocimientos que parten de la
sabiduría infinita universal. En nuevos niveles de conciencia sobrevienen
nuevos niveles de reflexión y energía. No por mucho observar el mandala se
tendrán mayores efectos. Una vez que nuestra mente capta el estímulo visual se
llevan a cabo los procesos de cambio. Volviendo a las siete formas principales
que comentamos al principio vamos a desarrollar la geometría del círculo
representante de la forma de Dios, la unidad y la totalidad.
El
círculo integra aquellas formas diferentes entre sí para interrelacionarlas en
la unidad. El centro verdadero del círculo es un punto, pero el punto carece de
dimensión y de lugar por lo tanto escapa a nuestra percepción y capacidad de
manifestación. No pertenece a nuestro mundo, porque en nuestro mundo todo tiene
extensión, dimensión, porque el mundo es forma, pero el punto pertenece a otra
escala del ser. Existe más allá del mundo, Es metafísico en el sentido más
literal. El punto simboliza la unidad, la totalidad, la perfección. El punto lo
contiene todo, sólo que en potencia, no manifestado. De él nacen el círculo y
la esfera que son las formas en las cuales se revela el punto. Lo que en este
es todavía potencia metafísica cobra configuración formal en el círculo y la
esfera. Todos los cuerpos Platónicos son distintos y en realidad constituyen la
unidad (la esfera). Se trata, pues, de una progresión infinita.
La
geometría sagrada nos hace comprender la unidad de la vida y encontrar el
origen común de sucesos diversos entre sí. Para llegar a la unidad tenemos que
encontrar la integración. Siempre hemos visto la dualidad como algo normal
(blanco, negro, bueno, malo, etc.), y por tal motivo no podemos integrar la
parte femenina de nuestro cerebro (lado derecho), donde se encuentra la unidad
de la conciencia y el espíritu. A la par nuestra parte masculina (lado
izquierdo), no cree en ello, así nos hace ver la dualidad en todas partes.
Algunos
datos de conciencia de cuarta dimensión: Los polos se reúnen casi hasta
desaparecer. No necesitamos del conflicto para crecer. El amor y la luz
comienzan a brillar cada vez más. La primera consecuencia es la eliminación
total del temor psicológico. El pensamiento es creativo. Crea instantáneamente
lo que necesita en ese momento. Perdemos casi toda densidad que nos acompaña en
la dimensión actual. La conciencia de cuarta dimensión es grupal. El avance
individual afecta positivamente al grupo. En antropología a esta conciencia se
le llama sinergia. De la misma forma el avance del grupo es el avance individual.
La esfera y el tiempo, son unidad.
Cierto, así es; las leyes del Universo están basadas en la racionalidad y siguen los parámetros que el Creador fijó desde el inicio para que todo tuviera armonía.
ResponderEliminarLa distorsión es kaos; desarmonía. La mayoría de las mentes humanas siguen los parámetros de las emociones; sobretodo las negativas...y aún creen que tienen razón en sus planteamientos y actitudes; eso solo lo hace gente que NO tiene sentido común y que se encuentra cerca de la locura; que solo es una distorsión de la realidad.